Diario Información,En la provincia: La menor infestación de procesionaria de los últimos 20 años

Diario Información,En la provincia 05.03.2013
Las condiciones climatológicas, las fumigaciones y los ciclos naturales del insecto han contribuido

pérez gil

El grado de infestación de la procesionaria en los pinares de la provincia de Alicante es el más bajo de los últimos 20 años. Así lo reflejan los datos que maneja el servicio de Ordenación y Gestión Forestal, que depende de la Conselleria de Medio Ambiente, tras comparar la información extraída de la prospección fitosanitaria de la primavera pasada con las precedentes. A través de este sistema de control de plagas, que este año acaba de iniciarse de cara a la campaña de 2014, se mide el grado de afectación de la masa arbórea en las diferentes comarcas para establecer unos criterios de tratamiento que se aplica al otoño siguiente, que es el momento idóneo porque el insecto suele poner los huevos sobre las hojas de los pinos a finales de verano y principios de otoño. Y este tratamiento puede realizarse a través de fumigaciones aéreas pero también de forma manual con mochilas, en todoterrenos con cañones pulverizadores o instalando trampas de feromonas sexuales para mariposas o casas nido para los pájaros que se alimentan de este tipo de orugas.


Los factores por los que este año se ha reducido la presencia de la temida Thaumetopoea pityocampa son varios. El frío y la lluvia diezman su población al igual que las fumigaciones. También reducen su número la mayor presencia de las aves que se las comen o el propio ciclo natural de este insecto venenoso que, en casos extremos, puede provocar fuertes reacciones alérgicas, con cuadros de irritación en los ojos y en la piel en forma de sarpullido o erupción en el cuello, los brazos, las piernas y el torso. Los efectos pueden durar varias semanas e incluso ir acompañados de problemas respiratorios. De ahí que los expertos aconsejen no tocar los gusanos ni golpear el bolsón en el que anidan colonias de entre 80 y 250 ejemplares porque, cuando la procesionaria se siente amenazada, suelta al aire unos pelillos urticantes invisibles al ojo humano que, vistos con microscopio, se asemejan a unos pequeños arpones que liberan el veneno sobre la piel al más mínimo contacto.
En estas fechas la presencia de la procesionaria se hace más notoria porque con el buen tiempo aumentan las salidas al monte y los gusanos comienzan a descender de los pinos, tras devorar sus hojas, para enterrarse debajo de la tierra de donde salen en verano en forma de polilla parda nocturna. Por este motivo hay pinos que parecen secos y eso genera, cada año, preocupación social y una petición de intervención por parte de los poderes públicos para evitar este fenómeno cíclico. Sin embargo, según ha explicado el jefe de la sección de Gestión Forestal de la Conselleria "la procesionaria es un insecto natural del pinar mediterráneo, lleva miles de años conviviendo con él, y erradicarlo por completo sería ir en contra de la propia biodiversidad, lo cual es un error. Nuestra función debe limitarse a controlar su población para que no se convierta en plaga y -añade Eduardo Pérez Laorga- hay que aclarar que la práctica totalidad de los pinos afectados recuperan todas sus hojas en las primaveras siguientes. No es cierto que los pinos se secan porque la procesionaria jamás mata al pinar. Y mucho menos este año en el que las prospecciones realizadas en la primavera de 2012 establecen una situación buena para el Medio Vinalopó y l'Alacantí, y muy buena para el resto de las comarcas de la provincia". Por lo tanto niega el técnico que este año haya plaga.

. Bookmark the permalink.

Dejar una respuesta